Ahora que se acercan las fechas navideñas (cada vez antes gracias a El Corte Inglés) muchos están pensando en hacer las presentaciones oficiales de sus novios a sus familias, amigos, y compañeros de trabajo. Cuando el susodicho a presentar es “el novio marica” de un marica la expectación crece. A las típicas preguntas de ¿será guapo? ¿serán felices juntos? habrá que añadir ¿tendrá pluma? ¿se darán besitos delante de nosotros? ¿quién dará por culo a quién?, etc… También hay que sumar el componente meramente egoísta, porque un novio no es solo para ti, no, tus familiares y amigos también esperan algo de él. A quién no le resultan familiares estas frases:
- “Ay, a ver si el niño ya que es maricón se nos casa con algún médico, que tu padre está ya con los achaques”
- “Oye, tu novio ese que está tan cachas podría venir a echarnos una mano con la mudanza”
- “Nene, que er Johny se ha echado un novio con coche que nos puede llevar al Fabrik”
- “Uy, si su novio es un encanto y como está metido en cosas de moda nos consigue siempre pases para los desfiles”
- …
Los padres, en general, ven con buenos ojos que sus hijos maricas se echen novio, mucho más que sus hijas, principalmente porque piensan que así van a sentar la cabeza y van a dejar esa vida de perversión y lujuria que, sin decirlo, creen que llevan. Si además es hijo único aparecen esperanzas de compensar carencias vitales que pudieran haber tenido con su hijo:
- “uy, es un tío, igual puedo ver los partidos del Madrid con él, porque con mi hijo na de na”
- “¿y si es muy afeminado podré comentar con él el ¡Hola!? ¿le gustarán los musicales?”
- “esperemos que sepa cocinar, porque a este niño entre su padre y yo lo hemos hecho inútil”
- …
Los amigos solteros suelen tener una inquietud principal: que el novio no les secuestre a su amigo y dejen de verlo durante los 2 años que dure la relación. Además, en los grupos de amigos “frikis”, siempre estará la pregunta de “¿será uno de los nuestros o será rarito?”. Por “uno de los nuestros” se entiende que comparta el frikismo que les une a ellos ya sea ver todas las películas que echen al mes en la filmoteca, jugar a todos los juegos de Mario o no perderse ningún concierto de música barroca de la ciudad.
Para los amigos emparejados la cosa cambia y las prioridades son que cocine bien, sea buen anfitrión y que tenga coche para apuntarse a las escapadas de parejitas que organizan una vez al trimestre.
Los exnovios quizá sean los más problemáticos. El antiguo novio, despechado en el fondo, irá a buscarle pegas al nuevo novio (pues está fofo, no sé que le ha visto, tiene pinta de follar mal, etc…) y porque el nuevo novio siempre lo va a mirar con algo de celos (¿todavía sentirá algo por él?).
Con todo esto el momento de la presentación es bastante tenso: unos esperando que se cumplan sus expectativas y el otro intentando cumplirlas lo más buenamente posible. Para las presentaciones hay que intentar evitar:
- Las comidas/cenas. Hay gente que no se siente a gusto comiendo entre desconocidos. Además uno no se puede mover del sitio. No hace falta decir que presentar al novio a la familia en la cena de Navidad es la peor idea posible.
- Los viajes. Eso de llevarte al novio de viaje con los amigos suena muy bien en un principio pero es un tanto arriesgado ponerlo a convivir con otra gente con la que no sabes de antemano si va a congeniar.
- De copas (esto para los amigos, pero si te llevas a tus padres de copas con tu novio merecéis un premio los cuatro). No suele ser buena idea conocer a alguien por primera vez borracho por mucho que tu novio y tú os conocierais borrachos como monos.
Por contra son recomendables:
- Los encuentros casuales. Queda de lo más natural y apropiado
- Un concierto, un cine, un partido…: Compartir una afición es una buena manera de empezar.
- Las cañas y las meriendas. Son versiones “light” de las comidas y de ir de copas.
Finalizamos con unos cuantos consejos generales:
- Si el novio a presentar está en paro avisad antes para evitar el momento incómodo de la pregunta “¿a qué te dedicas?”. Si no tiene estudios, igual.
- Si hay una gran diferencia de edad (maduritos o niñatos) avisad también antes. No queremos caras de sorpresa indisimulables.
- Informa antes a tu novio de lo que se va a encontrar. Conviene saber si el padre es un facha o tal grupo de amigos son perroflautas totales y van a mirar mal a cualquier pijo. No queremos que se esconda ni que mienta pero sí al menos que lleve las defensas preparadas.
- Si no has podido evitar la comida/cena de presentación y tu novio es rarito para comer infórmate bien antes del menú o avisa de sus rarezas. No hay una peor impresión que un “eso no me gusta”/”no puedo comer hidratos de carbono por las noches”.
- Durante la presentación saca temas en los que sabes que tu novio va a quedar bien y va a gustar a los presentes.
- Estableced previamente palabras secretas para avisar de que la conversación va mal por ahí. Ejemplo, palabra clave “bitterkas”:
- Padre: ¿Y vives de alquiler?
- Novio: Sí, es que lo de comprar una casa a mí siempre me ha parecido una locura…
- Hijo: Mamá, ¿tenemos bitter kas? Es que, ¿sabes? Pedro es la única persona que conozco que le gusta el bitter kas…
- Madre: ¿Sí hijo mío? Pero si eso es muy antiguo….
- Acabamos de evitar un momento tenso porque los padres están entrampados hasta las orejas con dos hipotecas que difícilmente pueden pagar. Conviene elegir palabras clave que por sí solas puedan abrir un hilo nuevo de conversación como “Facebook” o “Cleopatra”
- Si os conocisteis de una manera de la que os avergonzáis (en una orgía, poniéndole los cuernos a tu anterior novio, por el grindr, etc…) llevad bien preparada la historia falsa. Con los nervios todo puede fallar.
- Id follados a la presentación, las tensiones sexuales en esos momentos no ayudan nada y además iréis más relajaditos.
¡Mucha suerte a todos!