En el buzón de contacto del blog hemos recibido una carta que por su interés reproducimos aquí.
En los últimos años nuestra sociedad ha ido avanzando en derechos e igualdad. Aunque queda mucho por conseguir, lacras como el machismo o la homofobia poco a poco van desapareciendo. Sin embargo, de un tiempo a esta parte hemos detectado un auge en nuevas formas de discriminación que nos preocupa seriamente. Queremos incidir en una que nos afecta en especial: el activismo gay. No hay que confundir el activismo gay con ser un activista de los derechos LGBT. No, el activismo gay es el equivalente en el mundo homosexual al machismo del mundo heterosexual, esto es, el desprecio y discriminación de las personas pasivas. ¿No somos también los pasivos hombres como los activos? ¿No somos capaces de amar y de vivir igual que los activos? ¿No somos igual de necesarios para un coito que el mejor de los activos? ¡Basta ya de tanta hipocresía! Estamos hartos de esa supuesta superioridad de los activos, como si los pasivos fueramos desesperados en busca de un pene enorme. ¿No buscan acaso ellos culos en todas sus variedades? ¿Por qué ese estigma? Los estereotipos del pasivo afeminado y con pluma no tienen nada que ver con la realidad. Circulan varias listas (que evidentemente nosotros no haremos públicas) de famosos homosexuales machitos que son pasivos.
Por todo esto nuestra asociación ha decidido emprender una campaña para la dignificación del rol pasivo que incluirá varias acciones y cuyo objetivo máximo será conseguir que el lema del orgullo gay 2014 sea “por la dignidad pasiva”.
Agradeciéndoles afectuosamente su atención le pedimos que dé máxima difusión a este comunicado.
Muchas gracias.
Asociación de pasivistas orgullosos. “Somos pasivos, no putitas ni sumisas“
¿Y qué tiene de malo ser putitas o sumisas?
Pues eso digo yo, que qué tendrá de malo.
De todos modos sí que he visto en más de una ocasión esa “pasivofobia” que es hermana gemela de la “plumafobia”. Da para un post de pensar…
Yo, tras acudir a una charla en COGAM, escribí una reflexión al respecto: http://svoice.blogspot.com.es/2013/03/plumafobia.html
Estoy de acuerdo en que existe la “pasivofobia”, en que es gemela de la “plumofobia” y en que es una vergüenza que ambas existan entre los que combatimos la homofobia, pero la firma del comunicado, eso que parece ser el lema de la Asociación de pasivistas orgullosos, tampoco es ningún avance.
Si ahora resulta que vamos a combatir la pasivofobia para perpetuar la putitafobia y la sumisafobia, pues… ¡para ese viaje no hacen falta alforjas (ni comunicados, ni Asociaciones de pasivistas orgullosos)
“putitafobia”, fan total 🙂