El facha

El facha es el más malote de su clase. Yo supe que era facha desde la primera vez que me puso la cam para enseñarme su cuerpo fibrado. Una bandera con el pollo colgada en la pared no puede significar otra cosa.

Es hetero, con su novia de toda la vida. Claro, como buen facha. Pero le gusta que le traten como a una puta. Si esto se quedara solo en poner cara de zorra por la cam, enseñar el culito e imaginar que se está tragando un rabo supongo que en su mente nacionalultracatólica esto no pasaría de ser un pecado de pensamiento. Pero es que al facha no solo le gusta imaginar que le obligan a comer un rabo. No. Le gusta que de verdad se lo hagan tragar hasta el fondo. Y por eso queda conmigo.

Al principio pensé que, por coherencia con su ideología, al llegar a su casa, por las noches, se arrepentiría de todas estas cosas. Eso fue hasta que una de las veces que quedamos me pidió que le grabara con su móvil con toda la lefa chorreándole por la boca. Así que el facha, por las noches, lo que hace es ponerse esos vídeos para ver lo puta y maricona que ha sido y pajearse mientras tanto.

Por eso cuando veo a un facha en la tele diciendo burradas y empiezo a ponerme nervioso pienso en mi facha y me relajo imaginando que quizás este también tenga sus vicios tan contrarios a aquello que predica. Si me sale la vena pesimista diciendo que no, que mi facha es una excepción, se me aparece la imagen de PedroJota para recordarme que sí, que es posible.

Casa inteligente

Por una vez, y sin que sirva de precedente, vamos a dejar las mariconadas en este blog a un lado para adentrarnos en temas bastante friki-tecnológicos-informáticos. Si eres un lector habitual del blog al que no le interesan estas cosas ni te molestes en seguir leyendo porque va a ser largo y aburrido para ti. No te lo tendremos en cuenta.

La idea de automatizar la casa pastosa surge por varios motivos:

  • Eficiencia energética.
  • Comodidad y automatización de tareas.
  • Diversión frikeando con diversas tecnologías.
  • Vanidad geek.

Para entender el contexto es necesaria una breve descripción de la casa pastosa y sus peculiaridades. Es un el típico piso de soltero (aunque tiene habitación de invitados) con calefacción individual, una tele LCD grande, un amplificador estéreo inglés para la música conectado a un reproductor de cds con unos altavoces B&W y un amplificador 5.1 para la televisión, reproducción de películas y playstation 3 con sus 6 altavoces Infinity. Además son destacables los hecho de que el señor pastoso se pase el día escuchando música y suele hacer bastantes fiestas.

Entremos pues en materia. El corazón del sistema es esta pequeña joya:

Raspberry Pi

Raspberry Pi

una Raspberry Pi: un miniordenador de bajo consumo con chip ARM, conectores USB y ethernet, salida HDMI y funcionando con Linux (Debian) por menos de 35 dólares.

Media center

Un software de media center nos permitirá a través de una interfaz intuitiva y sencilla ver todas las películas y series descargadas en la televisión. En este caso el software elegido es el estupendo XBMC. El primer paso es conectar la Pi a la red local, a un disco duro externo por USB y su salida HDMI al amplificador 5.1 (que está conectado a su vez a la tele).

Raspberry en su caja conectada por HDMI y al disco duro

Raspberry en su caja conectada por HDMI y al disco duro

La instalación del XBMC es trivial, pues hay disponible una versión compilada específicamente para la Pi. Para controlar el media center desde el móvil disponemos de una aplicación maravillosa llamada Yatse:

Ejemplo de listado de series

Ejemplo de listado de series

Ejemplo de control de la reproducción

Ejemplo de control de la reproducción

Ya podemos ver las películas y series que tenemos descargadas. Ahora es necesario automatizar la descarga de nuevas películas y series (hay que aprovechar antes de que el gobierno criminalice la copia privada). Para descargar utilizamos rtorrent en la Pi, principalmente porque puede funcionar en background sin necesidad de un interfaz, porque se puede controlar programáticamente y porque permite ejecutar comandos y scripts tras ciertos eventos. Configuramos rtorrent para que cualquier fichero torrent que aparezca en un directorio determinado comience a descargarse. Ahora compartimos ese directorio de la Pi por red con el resto de ordenadores de la casa y voilà. Pero con las series podemos ir un poco más lejos: utilizar un feed rss se las series que seguimos para descargarlas automáticamente. En este caso usamos un feed personalizado que previamente hemos creado en dailytvtorrents.org. Con un pequeño script en python que se ejecuta cada hora descargamos el RSS con los torrents de las series, lo parseamos y comprobamos si hay algún capítulo que no tengamos, en cuyo caso lo descarga y lo deja en el directorio donde rtorrent lo cogerá para empezar la descarga. Una vez se han completado las descargas de los torrents necesitamos “inyectar” esos vídeos en la base de datos del media center. Para eso usamos el evento de rtorrent de descarga completada para ejecute otro script en python que mueve el fichero al directorio que tenemos configurado en el media center para series o películas con el nombre apropiado y que avise al media center mediante el interfaz jsonrpc de que hay nuevos vídeos y necesita reescanear el directorio.

Control por infrarojos de televisión, cd y amplificador

Para empezar a ver una película no basta con iniciar la reproducción en el media center. Es necesario encender la televisión, poner el canal de entrada HDMI, encender el amplificador y seleccionar también su canal de entrada (uno es el de la Pi y el otro la playstation 3). Para esto son necesario dos mandos a distancia, que unidos al tercer mando para controlar el reproductor de CDs se convierten en un engorro. ¿La solución? Construirnos un emisor de infrarrojos para la Raspberry que nos permita controlar estos tres aparatos. Bueno, como construir un cacharrito de tan bajo nivel puede llevar mucho tiempo optamos por el USB IR Toy de Dangerous prototypes:

Emisor/receptor de infrarrojos por USB

Emisor/receptor de infrarrojos por USB

Esta pequeña placa es una maravilla: hardware y firmware completamente open source que podemos modificar a nuestro antojo. Tras instalarle el firmware y comprobar que recibe y emite correctamente tendremos que toquetear los fuentes de lirc para que lo acepte como dispositivo de infrarrojos. Después viene la tediosa tarea de “grabar” los comandos de cada mando a distancia para que luego podamos reproducirlos con el comando “irsend”.

Aplicación de control central

Nuestra Raspberry Pi ya puede encender y apagar la tele, cambiar los canales, subir el volumen del amplificador, etc… Pero como la televisión, el amplificador y el reproductor de CDs solo reciben comandos por infrarrojos y no emiten nada no hay manera de saber su estado. Y es necesario saber el estado porque todos estos aparatos no tienen un comando de encendido y otro de apagado sino uno genérico de “power” que o bien los apaga o bien los enciende dependiendo de cómo estuvieran. Por tanto necesitamos programar una aplicación de control que por un lado mantenga el estado y por otro centralice los comandos a enviar (de momento solo los infrarrojos, pero más adelante añadiremos más funcionalidades). Esto lo haremos con un programa sencillo escrito en JavaScript y ejecutado con node js. Además será el encargado de, mediante un interfaz jsonrpc, permitir el control remoto de todas las funcionalidades, bien desde el móvil, bien desde una aplicación web. Como es importante la seguridad (no queremos que nadie ande jugando con nuestra casa) esta aplicación confiará en cualquier petición que llegue por la red local (es decir, que esté conectada al router por cable o bien por wifi mediante contraseña WPA2) pero a cualquier petición que venga desde internet le exigirá que firme la petición con una clave privada RSA que solo nosotros poseemos. Para poder conectarnos remotamente a la aplicación central necesitaremos o bien una IP fija pública de internet o bien una DNS dinámica. Como nuestro caso es el segundo, hemos configurado la Pi para que utlice una entrada de DNS dinámica de no-ip.org.

Código de la aplicación de control

Código de la aplicación de control

El estado de la casa está definido por modos como “Ver la televisión”, “Trabajar”, “Ver serie o película”, “Escuchar música”, “Dormir”, etc… y en función del estado la aplicación central colocará los aparatos en el estado correspondiente.

Aplicación de control desde el móvil

Para controlar los estados usaremos en un principio una aplicación para un móvil Android. Cuando la aplicación detecte que el móvil se encuentra conectado a la wifi de casa enviará los comandos tal cual y cuando esté usando otra red wifi o la red móvil enviará los comandos firmados. Esta aplicación Android es prácticamente un interfaz tonto que envía los comandos a la aplicación central.

Selección de modo

Selección de modo

Control de la televisión

Control de la televisión

Música maestro

Para la música en CD hay poco misterio porque sigue siendo necesario levantarse a meter el CD y tiene su amplificador propio conectado a los altavoces. Simplemente añadir los comandos para su control por infrarrojos a la aplicación central y unos cuantos botones para la aplicación de control remoto del móvil.

Lo interesante y lo que más posibilidades nos da es la música en mp3 y flac almacenada en el disco duro externo y la música que está reproduciendo el PC. Queremos poder gestionar playlists de los mp3 y flac y reproducirlas en cualquier lugar de la casa y escuchar el audio del pc también en cualquier lugar de la casa (spotify, youtube o cualquier otra cosa). Los puntos de escucha de la música van a ser el salón (mediante el amplificador 5.1), la ducha y el dormitorio. ¿Y como enviamos la música de una parte a otra sin dejarnos una pasta en aparatos airPlay? Sencillo, reciclando hardware obsoleto y usando la wifi para hacer streaming.

El streaming lo resolvemos con un servidor icecast en la Raspberry Pi. Así el PC podrá iniciar un streaming con su audio, la propia Pi podrá inciar un streaming con la playlist de mp3 almacenados y los clientes (la propia pi para el amplificador, la “ducha” y el “dormitorio”) podrán reproducir dicho stream. Puede sonar un poco redundante que para escuchar música en mp3 en el salón la Pi haga streaming de ese mp3 y que ese stream lo reproduzca la propia Pi, pero es la mejor manera de mantener una arquitectura simple y coherente para todo el sistema.

Para que el PC inicie o detenga el streaming de su audio necesitaremos una pequeña aplicación que se registre con la aplicación de control central y acepte las órdenes que esta le va a dar (básicamente iniciar y detener streaming). Realizar streaming del audio que está sonando en un PC es muy sencillo si utilizamos linux:

gst-launch-0.10 pulsesrc device=alsa_output.pci-0000_00_1b.0.analog-stereo.monitor ! \
audioconvert ! audio/x-raw-int,rate=44100,channels=2 ! lamemp3enc bitrate=128 ! \
shout2send ip=pi port=8000 password=mipassword mount=/homeMusic.mp3

Cuando solicitemos desde el control remoto que queremos escuchar el streaming del PC o bien la playlist en el salón la propia aplicación de control reproducirá ese stream (recordemos que la Pi tiene conectada su salida HDMI al amplificador). Si queremos escucharlo en la ducha o en el dormitorio la aplicación central ordenará a los dispositivos instalados en la ducha y en el dormitorio que inicien la reproducción por red del streaming.

Habíamos dicho más arriba que íbamos a reciclar hardware para hacer nuestros reproductores de música. La primera opción fue usar una tablet Android rooteada conectada a unos altavoces… pero la tablet consume mucha electricidad como para dejarla encendida todo el día así que la opción fue hackear un ebook viejo para poder instalar la aplicación que reciba las órdenes.

Hackeando un ebook

Hackeando un ebook

Este de arriba es el que está instalado en la ducha. Para el dormitorio y a falta de otro ebook (se aceptan donaciones) optamos por utilizar… ¡otra Raspberry Pi!, esta vez el modelo barato de 25 dólares sin ethernet y con un solo usb (que usaremos para la conexión wifi):

Otra Pi para reproducir música en la cama

Otra Pi para reproducir música en la cama

La elección de los altavoces es también importante porque queremos que estén encendidos todo el día sin consumir. Así que optamos por unos JBL con una estupenda relación calidad/precio que se apagan automáticamente cuando llevan un rato sin recibir señal por el jack de audio. Una maravilla. El sistema de colgado en la pared dio sin embargo más problemas:

Las mallas nunca fueron lo mío

Las mallas nunca fueron lo mío

Luces

Siguiendo con la automatización de la casa el siguiente paso son las luces. Tras descartar muchas opciones como sistemas X10 para controlar el encendido y apagado la opción elegida fueron bombillas LED con interfaz ZigBee Light Link que permiten regular la intensidad y el color. En concreto un pack Philips Hue que viene con su su propio controlador ZigBee que se conecta a la red y oferece una interfaz REST+json amigable para hackers. En total tres bombillas: dos en el salón y una en el dormitorio. Implementamos en la aplicación de control central el soporte para controlar estas luces y su gestión, incialmente en dos modos:

  • Manual: las luces se están quietas y se puede controlar mediante el móvil
  • Automático: las luces se ajustan al modo actual de la casa y a la hora

Podríamos haber añadido a la Pi un sensor de luz para que esta supiera cuando es de noche y de día y pudiera encender y apagar las luces cuando estuvieran en modo automático. Sin embargo las matemáticas son mucho más divertidas (y más baratas) y conociendo la latitud y la longitud de Madrid y la hora actual con un par de ecuaciones podemos calcular a qué hora va a salir y ponerse el sol ese día. Así, en modo automáticos las luces del salón se irán encendiendo progresivamente según nos acerquemos a la puesta de sol y se apagarán automáticamente al amanecer. Todo eso suponiendo que estemos trabajando, claro. Si estamos en modo “durmiendo” todas las luces estarán apagadas, si estamos en modo “televisión” o “películas” las luces estarán encendidas pero muy suaves y con tonos pastel.

Para la aplicación de control de Android reutilizamos código libre para hacer bonitos diálogos que nos permitan seleccionar el color e intensidad de cada una de las luces manualmente:

Control de luces

Control de luces

 

Alarma

¿Hartos de los malditos despertadores? Nuestra casa inteligente viene en nuestra ayuda. Pudiendo controlar la luz del dormitorio y su “música” programamos en la aplicación de control central un sistema de alarmas configurables desde el móvil para que nuestro despertar sea un agradable sonido de pajarillos (o el amanecer de Peer Gynt de Grieg) combinados con un aumento gradual de la luz azul que simule un amanecer.

El amo no está en casa

Recordemos que nuestra aplicación de móvil ya sabía si estaba conectado a la wifi de casa o no para usar los comandos sin firmar o firmados. ¡Aprovechemos eso para automatizar aún más la gestión de la casa!. Implementando un pequeño broadcast receiver de Android que se escuche los cambios de conectividad podemos hacer que el móvil avise a la aplicación de control si estamos en casa o no y la aplicación de control se encargará de apagar las luces, la tele y la música cuando nos vayamos (en la práctica al poco de meternos en el ascensor) y de ir encendiendo las luces para cuando lleguemos.

Alertas visuales

Las luces no solo sirven para darnos luz sino que también podemos utilizarlas para darnos información. ¿Nos llaman al móvil? Cinco parpadeos de luces en toda la casa (solo si el amo está en casa, claro). ¿Mete un gol el Madrid? Un parpadeo en blanco de la la luz de la derecha. ¿Es el gol en contra? Un Parpadeo en rojo.

Luces y música

¿Queremos que las fiestas en nuestra casa no tengan nada que envidiarle a las de las discotecas? ¿O simplemente queremos escuchar y sentir mejor la ópera? Con nuestras luces configurables podemos. Recordemos que la música del salón suena a través de nuestra Raspberry Pi… así que podemos analizar por sofware la onda de sonido para ajustar las luces a ella. Para ajustar la intensidad de la luz al volumen de la música nos vale con parsear la salida del reproductor alsa (que el el que reproduce el streaming) para ir capturando los volúmenes. Pero nuestras luces no solo son capaces de cambiar de intensidad sino también de color. ¿Y qué podemos asociar al color? El timbre de la música. Pero para esto nos toca meternos en el barro y modificar el aplay para antes de enviar el sonido a la salida analizar el buffer para intentar analizar las muestras y sacar la nota predominante. Wow, suena como a muchas matemáticas. Afortunadamente el mundo del software libre sale en nuestra ayuda y podemos encontrar por internet el código de dywapitchtrack que hace precisamente esto. Nuestro trabajo será solo adaptar ese código para incorporarlo al aplay y generar una salida parseable por nuestra aplicación de control. El resultado es este:

El vídeo no se aprecia muy bien pero se hacen una idea 🙂

Ambilight casero

Hemos adaptador las luces a la música… ¿Por qué no hacerlo también a la imagen? Se trata de copiar el sistema ambilight ese que tiene algunas teles carísimas con lo que ya tenemos. Pero esto no va a ser tan fácil. Si para el caso del audio podíamos analizar la onda final fácilmente con el vídeo nos encontramos con un problema: la Raspberry Pi decodifica y renderiza el vídeo por hardware gracias a un chip especializados (si no difícilmente iba a poder reproducir h264 a 720p tan suavemente). Toca mirarse el código fuente del omxplayer, el reproductor de vídeo que utiliza el hadware de la Raspberry. Lo que queremos es capturar de algún modo las imágenes que se van a renderizar por la salida HDMI. Aprendemos que todo el proceso se hace con pipelines de OpenMax. Vamos a la documentación de Broadcom (el fabricante del SoC de la Raspberry) y vemos que implementan un elemento llamado video_splitter que duplica el stream de vídeo hasta cuatro veces. Esto nos sirve. Tenemos que colocar este splitter a la salida del elemento “decoder” y conectar una de las patas al elemento “render” (que es el que lo saca por el HDMI) y otra a un elemento nuestro que sea el que analice los colores de la imágen. Tras unas cuantas horas de hacking en el código de omxplayer con OpenMax tenemos por fin los datos del color predominante en formato hsv que podemos enviar a nuestra aplicación de control para que ajuste la luz trasera de la televisión.

Código modificado de omxplayer

Código modificado de omxplayer

Lo más divertido de esto fue ver que alguien había hecho básicamente lo mismo para controlar sus luces (mediante otro sistema). En cualquier caso se aprende bastante intentando hacer las cosas uno solo. También tuvo su gracia “hackear” una lámpara de ikea de brazo flexible para cambiarle el casquillo y usar uno que funcionara con nuestra bombilla. El resultado:

 

Reconocimiento de voz

Otra característica que siempre se plantea con los temas de automatización es el control mediante reconocimiento voz. Las pruebas con pocketsphinx no fueron del todo mal (aunque tardaba en procesar lo suyo). Sin embargo dos problemas fundamentales hicieron descartar la idea:

  • Uno tiende a sentirse más gilipollas hablando solo que dándole a un botón en el móvil
  • Con pocketsphinix no hay manera de distinguir voces de un hablante u otro y el sistema se ponía a hacer cosas si en una película decían determinadas palabras. Una posible solución habría sido utilizar palabras muy poco frecuentes como comandos de control como por ejemplo nombres de pájaros raros: archaeopteryx, ornotirrinco, enantiornithes… pero claro, si uno se siente gilipollas hablando solo… hablando solo con esas palabras ni les cuento.

Próximos pasos

Hasta aquí hemos llegado. Los siguientes pasos probablemente sean:

  • Control de la calefacción: recuperando la Pi que hay en el dormitorio se acoplaría a la caldera y mediante un relé conectado a una GPIO de salida de la pi (plaquita mediante) y a los pines de entrada de la caldera (originalmente pensados para un termostato) seríamos capaces de encender y apagar la calefacción a nuestro gusto. Implementaríamos un modo manual  y otro automático que la encendiera si “el amo está en casa” y “no está durmiendo” en función de la hora, la fecha, la temperatura exterior y la temperatura interior (un sensor de 2 dólares para la Pi). La parte más divertida sería automatizar el “voy a encender la calefacción desde el móvil porque en 30 minutos estoy en casa”. Porque el móvil con su GPS, localización por wifi y un poco de magia debería ser capaz de detectar que uno se está aproximando a la casa el línea recta de manera continua e inexorable (¡hay que evitar que ponga la calefacción cuando uno esta de cañas por la zona!)
  • Control del portero automático. De nuevo con otra Pi, relés y conversores ADC que le permitan al sistema central saber cuándo llaman y abrir la puerta. Lo de hablar por el telefonillo desde el móvil sería para nota y podría dejar muy picuetos a los vecinos
  • Cerradura electrónica de la puerta de casa.

Conclusiones

Las únicas conclusiones posibles son:

  • Soy un poco geek
  • Tengo tiempo libre
  • Necesito un novio

Si se les ocurre alguna otra idea o se animan a hacer algo parecido háganlo saber en los comentarios. Hemos omitido deliberadamente cualquier listado de código fuente porque el artículo ya iba a ser ladrillo de por sí pero si alguien está interesado, lo mismo, a los comentarios y en un periquete montamos un repositorio en github con el código de todas las piezas de este frikisistema.

 

 

Comando G, la nueva generación

Hoy tenemos el honor de presentarles el nuevo proyecto de Pensamientos Pastosos: “Comando G, la nueva generación“. Los lectores más entrados en años recordarán Comando G como una de las series de dibujos animados favoritas de su infancia. Los puntos en común de nuestra nueva serie con la inspiradora son:

  • Dibujos animados llenos de colorido
  • Tramas apasionantes
  • G de gayer

El resto será todo diferente. Si la adaptación de la serie japonesa triunfaba en las pantallas de televisión de los hogares españoles de los 80 nuestra serie lo hará a través de internet, triunfando en los monitores LCDs y Retina displays del mundo entero.

La trama principal de la serie es sencilla: un temible grupo de villanos, el escuadrón alpha, intenta acabar con la gaycidad de España y nuestros héroes, el comando G (de gayer), defendiendo a los maricas,  desbaratará los planes de los malvados homófobos.

El escuadrón alpha ha sido reunido por el misterioso señor R, al que nunca se le ve la cara, y maneja desde las sombras los planes del escuadrón. Está formado por:

  • Pedro España: un antiguo tertuliano de intereconomía cuyo poder consiste en lanzar poderosos alaridos que noquean a sus rivales.
  • Padre Castidad: un cura del opus enviado personalmente por el papa para ayudar en esta causa. Sus armas son una cruz y un rosario mágicos que atontan a sus enemigos. Tiene un poco de pluma y sus compañeros a veces recelan de él.
  • Supermocho: ministro de interior de día, se calza sus mallas azules por la noche para luchar contra la amenaza gayer. No tiene ningún poder y va armado con un mocho. Suele lastrar las operaciones del escuadrón. Inexplicablemente le mantienen en el grupo.
  • Sor María: en realidad no estaba muerta, estaba de parranda con el escuadrón. Es capaz de convocar un ejercito de niños robados que tienen derecho a un padre y a una madre y odian a los mariquitas. Muerden y tiran de los pelos, son peligrosísimos.
  • Mario Vaquerizo: harto de que le llamen maricón decide unirse al escuadrón para acabar con la homosexualidad y que solo puedan acusarle de ser una mamarracha. Lanza rayos por los ojos que atontan a sus victimas a base de reducirles el C.I. a 40. Necesita cerveza para que su poder funcione.

El comando G (de gayer) se forma una noche en chueca tras el primer atentado del escuadrón alpha: el secuestro de Mónica Naranjo, pidiendo como rescate la destrucción de todos sus discos y eliminación de sus vídeos de youtube. Sus miembros son:

  • Otto: una musculoca de fuerza sobrehumana. Es el más sensible del grupo, suele llorar y está siempre canturreando ópera.
  • Mr.Fly: una moderna de manual que secretamente seguía siendo el webmaster de la página de fans de Mónica Naranjo. Su poder consiste en subir a su instagram fotos de cosas nada trendies y en segundos un ejército de hipsters aparece para destruir el objetivo. Pierde sus poderes cuando se queda sin cobertura.
  • Princesa: llegó a España huyendo del chavismo de Venezuela y encontró la felicidad en la España de Rajoy. No está dispuesto a que le arrebaten los derechos que otros consiguieron para él y usa sus temibles armas para ello: las plumas asfixiantes y el cañón de purpurina.
  • El Cisne: después de ser expulsado de los caballeros del zodiaco por gayer juró utilizar sus poderes para combatir la homofobia. Pero como España estaba muy tranquila se dedicó a irse de fiesta y a esnifar su polvo de diamante. Ahora ha llegado su momento.
  • Huertaman: una marica murciana que vino a la capital a estudiar comunicación audiovisual. Es el más noble del grupo y el que aporta sentido común. Su poder proviene de la huerta y le permite controlar toda la vegetación a su alrededor.

La fase de producción de la serie está muy avanzada y poco a poco les iremos mostrando concept art de los personajes. Ahora estamos centrados en el casting de voces (¿casting oral?). El único requisito es que la voz de Princesa la ponga un heterosexual.

 

Carta de un marica librepensador a un cristiano

Querido cristiano desconocido,

Permíteme empezar diciendo que respeto profundamente tu derecho a creer en el dios cristiano en cualquiera de sus versiones (católico, protestante, evangelista, etc…). Todo el mundo tiene derecho a creer en su libro de ficción favorito, faltaría más. Además comprendo perfectamente tu caso específico. El ser humano ha necesitado siempre suplir con creencias mágicas las explicaciones de fenómenos como la vida y la muerte que aún no estaban a su alcance. También entiendo que en pleno siglo XXI te niegues a aceptar las respuestas que da la ciencia. Por un lado el pensamiento crítico no está al alcance de todos y por otro el adoctrinamiento cristiano siempre ha sido terriblemente eficaz: desde pequeñitos, en la escuela, como un taladro. Ríete tú de de las pobres ténicas de propaganda de Goebbels o de las dictaturas comunistas. ¿Nunca te has preguntado por qué eres cristiano? ¿Quizás porque naciste en un país de tradición cristiana en una familia cristiana que te introdujo de pequeño en ese mundillo? ¿No piensas que de haber nacido en Arabia Saudí ahora serías musulmán?. Da igual, olvidemos el tema. Aceptemos que eres cristiano y punto.

Te dije antes que respeto que creas en lo que te de la gana, como si quieres creerte que porque naciste a finales de febrero y una señora en la tele dice que Saturno y Orión se miran con deseo tú vas a encontrar al amor de tu vida esta semana. Es tu vida. Haz lo que quieras. Lo que ya no puedo respetar es que utilices estas creencias para promover el odio y la discriminación contra los demás. En este caso concreto me voy a centrar en el odio hacia mi persona, un marica corriente. Puede que tú en concreto no odies a los maricas ni promuevas su discriminación, pero tu Iglesia, esa a la que sigues fielmente, esa a la que contribuyes religiosamente, sí lo hace. Eso no tiene mucho sentido, ¿verdad? Es como si yo digo que no odio a los negros pero voto al Ku Kux Klan. Yo en mi caso tendría dos opciones, o cambiarme de partido por uno que no queme a los negros o decirle a los de mi partido: “oye, ¿de qué coño vais quemando negros? Eso no está bien… o cambiáis o me largo”.

Sé que hacerte cambiar de idea acerca de tus creencias religiosas es casi imposible y ni siquiera lo voy a intentar. De lo que voy a tratar de convencerte en esta carta es de que tu Iglesia (y puede que tú también) anda muy confundida en este odio irracional, en sus intentos de promover la discriminación y en sus prioridades.

Empecemos por el final, por las prioridades, porque es algo que me choca bastante. Entiendo (y corrígeme si me equivoco) que toda la base de vuestras creencias es la biblia. Bien, yo, sin ser cristiano, me la he leído un par de veces y te puedo decir que las prioridades del cristianismo, según la biblia son cosas como el amor, la misericordia, compartir, la justicia, el perdón, la paz, etc… Como entiendo que no te fíes de mí porque no soy de los tuyos te voy a dar datos concretos. Esta es una representación gráfica de las palabras que más aparecen en la biblia (más grande, más veces aparece):

biblia

Por si eres de esos que dicen que lo que de verdad importa de la biblia es el nuevo testamento, aquí tienes las palabras del nuevo testamento:

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¿Ves por algún lugar las palabras mariquitas, homosexuales, invertidos, afeminados o monfloritas? ¿Contra natura acaso? ¿Verdad que no? Ya te lo digo yo: no están. Y no están porque su presencia en la biblia es tan pequeña que es irrelevante. No son sus prioridades. Vete a los diez mandamientos: amar a dios, respetar a dios, respetar las fiestas, a tu padre y a tu madre, no matar, ser fiel, no robar, no mentir, no tener pensamientos impuros y no codiciar. ¿Hemos visto a la Iglesia manifestarse por el amor? ¿Por el respeto a nuestros mayores? ¿Contra las grandes multinacionales que matan de hambre a millones de personas? ¿Contra el robo? ¿Contra los políticos que mienten al pueblo? ¿Contra el adulterio? ¿Contra la codicia de la banca? Pues no, oye. La Iglesia solo ha sacado a sus fieles a manifestarse por todo el país contra los maricones y contra el aborto. Y no me vengas que esas manifestaciones eran en defensa de la familia y de la vida, porque no. Cuando defiendes un único modelo de familia (inventado por cierto, porque las familias de la biblia eran de hombres mayores que compraban esposas, las mataban a parir y se compraban otra) estás atacando a todos los demás. Porque ojo, en esas manifestaciones y declaraciones no se dice “las familias cristianas debemos estar formadas por un padre una madre y muchos churumbeles”, no, se insta a los poderes públicos a que prohíban el matrimonio homosexual, que además es una cosa civil que no tiene nada que ver con ellos. Y sobre lo de la defensa de la vida me lo creeré cuando el lema de esas manifestaciones incluya la lucha contra la pena de muerte en EE.UU., contra las muertes causadas por el hambre en el mundo y cosas similares.

En resumen, resulta que a la Iglesia lo que más le importa es que no se puedan casar los maricones, que no se usen condones (ya me dirás tú lo que pensaba Jesús de cosas que ni existían) y que las mujeres no aborten.  Chico, yo si fuera cristiano de verdad me pensaría muy seriamente si quiero seguir en esa Iglesia.

Supongamos que hasta aquí estás de acuerdo conmigo: la Iglesia tiene confundidas sus prioridades y se centra en cosas bastante irrelevantes en vez de en defender los verdaderos valores cristianos. Me podrás decir que aún estando equivocados en las prioridades, el cristianismo sigue teniendo que censurar la homosexualidad porque así lo dice la biblia. Pues toca ponernos técnicos y ver qué dice la biblia.

Efectivamente la biblia dice en el Levítico 18:22 “No te echarás con varón como con mujer; es abominación.” Teniendo en cuenta que eso se lo decía Jehová a Moisés podemos entender que lo de que un hombre se acueste con un hombre es una abominación y como los homosexuales hacen esas cosas, los homosexuales hacen cosas abominables. Vale. Lo acepto. Pero con condiciones. Si vas a interpretar la biblia, concretamente el levítico, al pie de la letra no lo hagas solo con ese versículo concreto y hazlo con todo. Cojamos por ejemplo del capítulo 11 el versículo 12 “Pero todos los que no tienen aletas ni escamas en el mar y en los ríos, así de todo lo que se mueve como de toda cosa viviente que está en las aguas, los tendréis en abominación.” O sea, que un hombre se acueste con un hombre es exactamente lo mismo que comerse una gamba o una cigala. ¡Y vaya lo que le gustan las cigalas a los obispos!

Sí, ya sé lo que me vas a decir: que el antiguo testamento es especialito y no se puede interpretar al pie de la letra. Pues me quitas un gran peso de encima porque en el capítulo 20 dice “Si alguno se ayuntare con varón como con mujer, abominación hicieron; ambos han de ser muertos; sobre ellos será su sangre.” Ya me veía a ejércitos de cristianos matando maricones. Bueno, no solo maricones porque el Levítico no deja títere con cabeza y tendríais que ir matando a adúlteros, abuelos que le han cambiado los pañales a sus nietas o hijos que maldicen a sus padres.

Entonces estamos de acuerdo en que el antiguo testamento no se puede interpretar al pie de la letra, que tú no eres integrista, que esos son los musulmanes con su libro equivalente al vuestro y esos son muy malos. Vale, dejemos el antiguo testamento que aunque forma parte de vuestra biblia no hay que hacerle del todo caso y centrémonos en el nuevo.

La primera referencia al la homosexualidad en el nuevo testamento la encontramos en la primera epístola de Pablo de Tarso a los romanos. Aquí Pablo reparte cera para todos y, esta vez, para que no digan que la biblia es machista, incluye a las lesbianas:

Por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas; pues aun sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza,  y de igual modo también los hombres, dejando el uso natural de la mujer, se encendieron en su lascivia unos con otros, cometiendo hechos vergonzosos hombres con hombres, y recibiendo en sí mismos la retribución debida a su extravío..

Ah, pájaro, condenar la homosexualidad usando estos dos versículos es jugar suciamente a la descontextualización. Si lees los versículos anteriores verás que lo que Pablo estaba haciendo era describir algunas costumbres del imperio romano. En concreto el pecado que les atribuye a los ciudadanos romanos es idolatrar al hombre por encima de dios (“pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios“). Y sí, en la antigua Roma había relaciones homosexuales. ¿Eran vergonzosas? Pues hombre, teniendo en cuenta que aún no estaba aprobado el matrimonio homosexual eran por lo menos adúlteras en muchos casos. Y bueno, la gente en general siempre es vergonzosa con el sexo. En conclusión, aquí ni se condena la homosexualidad ni se dice que sea pecado.

Siguiente y última referencia a la homosexualidad en el nuevo testamento: de nuevo nuestro amigo Pablo, esta vez dirigiéndose a los corintios en su primera espístola capítulo 6 versículos 9 y 10:

¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios.

Ni los afeminados, ni los que se echan con varones” Cuanta vuelta para decir una sola cosa, ¿no? Vamos a mirar otras traducciones: “ni los afeminados, ni los homosexuales“. Aquí algo huele a chamusquina, vamos a buscar la fuente original mejor, el griego clásico. ¡Anda! En el original no usa dos palabras “afeminados+homosexuales” sino una sola: ἀρσενοκοίτης ¿No será que el traductor quiso explicar bien lo que él entendía? ¿Qué significa arsenokoitēs (que es la trasliteración latina)? Pues viene de la unión de ἄῤῥην y ἄρσην que significan respectivamente macho y cama (con connotaciones sexuales). Lo curioso de esto es que no hay una sola referencia escrita de la palabra arsenokoitēs para referirse a los homosexuales. En griego se usaba androkoitēs. ¿Y para qué se usaba la palabra arsenokoitēs? Pues es una palabra rara de cojones y solo la encontramos usada en el año 35 por el filosofo Filón. ¿Y para qué la usa? Para referirse a la prostitución sagrada. ¡Uy, sorpresa!… protitución sagrada…¿Y qué diablos es eso? Pues es una práctica muy antigua que se daba en la ciudad de Coritio. Anda, pues tiene lógica que Pablo le hable de eso a los conrintios, ¿no? ¿Pero en qué consistía exactamente? Tienes toda la información aquí pero te hago un resumen:

“En su forma de Ishtar, la diosa de la cultura sumeria se convierte en la diosa de la belleza y la sensualidad babilónica, a la que agradaban los actos de amor carnal y que para asegurar su veneración y culto se consagraban vírgenes al servicio del templo, dedicándolas a la prostitución sagrada, es decir a la prostitución selectiva y puntual, cuyo provento se dedicaba exclusivamente al servicio del templo […] Igualmente se dice que cada adolescente debe consagrar su primer acto sexual a la diosa y que este acto debe ser efectuado dentro del templo en la forma de un rito, similar al de las sacerdotisas regulares del templo.”

¡Toma ya! Pablo no estaba condenado a los mariquitas sino un tipo de prostitución en nombre de un dios… ¡Madre mía! Además, leyendo la parte esa de los adolescentes que tenían que tener sexo con las sacerdotisas… y ahora que solo hay sacerdotes… pues igual la traducción por “afeminados+homosexuales” no fue del todo inconsciente y se trataba de ocultar algo… que ya sabemos que la Iglesia ha hecho y ha ocultado.

Vaya, menuda chapa te he dado. Yo que quería ser breve. En fin, espero que si has llegado hasta aquí te replantees al menos ese odio a los homosexuales y si crees que los representantes de la Iglesia a la que sigues están obrando bien.

Atentamente, pastoso

Quedar con un desconocido para “conocer y lo que surja”

En el mundo marica suele ser muy habitual quedar con desconocidos a través de redes sociales, chats y aplicaciones de puterío para “conocer y lo que surja”. Esto de quedar con desconocidos con la misma orientación sexual solo puede tener tres fines:

  • Echar un polvo: Probablemente la más común de las situaciones. Ya explicamos en otra ocasión que ese “conocer y lo que surja” viene a significar en la mayoría de los casos “si me gustas follamos y si no ni como amigo ni con un palo”.
  • Ampliar el círculo de amistades maricas: Hay gente que con los maricas que conoce en su vida social real no tiene bastante, bien porque se mueva en mundos excesivamente heteros, bien porque su target sea diferente (abogados a los que les gustan bakalas, peluqueras que suspiran por camioneros, etc…) bien porque le falten amigas de las de “te voy a presentar a fulanito que es muy buen partido”.
  • Evaluar candidato a posible novio: Finalmente están los que eso de sacar al novio de su grupo de amistades no va con ellos y necesitan conocer a alguien de cero con el propósito de ennoviarse. Y además no les funciona eso de ligar en discotecas u opinan que en esos antros solo hay mala gente.

Independientemente del objetivo de quedar con un desconocido lo fascinante es el hecho en sí de hacerlo. ¿Cómo comportarse ante alguien al que solo conoces de unas pocas palabras a través de un teclado y que a) te quieres follar, b) te quieres hacer su amigo, c) quieres que se enamore de ti?

 

Reconocer a la otra persona

Porque más allá del primer caso (quedar para echar un polvo) eso de tener la primera cita en la casa propia o de la otra persona se ve como feo. Incluso muchos de los que quedan para “lo que surja” prefieren quedar en un sitio público por dos motivos:

  • Tener escapatoria fácil y rápida en caso de que no le guste el tipo
  • Miedo a que sea un loco que le vaya a secuestrar, robar o algo peor. Como si los locos, asesinos y ladrones no supiera disimular… en fin.

En cualquier caso, al quedar en un sitio público el tema de reconocer a la otra persona siempre es divertido. ¡Cuántos muchachos se ven por el edificio de Telefónica o la plaza de Callao (dos de los lugares favoritos de los maricas madrileños para quedar con desconocidos) mirando ansiosamente a su alrededor y al móvil a ver si ese que se acerca es su príncipe azul!. Aquí las viejas consignas de la época premóvil siguen siendo válidas: “llevo unos pitillos rojos”, “medias negras, bufanda a cuadros“, o “voy con una bolsa del Primark”. Los equívocos están a la orden del día y más de uno se pone a hablar a un verdadero desconocido que está esperando a la novia o a su tía de Cuenca.

La presentación

Los hay que dan directamente dos besos y los hay que dan la mano, muy heteros ellos. A veces algunos confiesan su verdadero nombre, otros esperan al cuarto polvo y otros lo callan para siempre. En el momento de la presentación se resuelven muchas dudas:

  • “Vaya, las fotos que me pasó deben de ser de hace tres años”
  • “Uy, si es un caniiiiijo”
  • “Me encanta su voz”
  • “Joder, por la cam no se le notaba la pluma”
  • “¡Es mucho más guapo en persona!”

¿Dónde ir?

Tras la presentación toca elegir dónde ir. Aquí ya se ponen de manifiesto algunos detalles del carácter. Para empezar se ve quién lleva la iniciativa y quién se deja llevar (el drama es cuando se juntan dos indecisos a los que les da todo igual). Luego, el lugar elegido revela mucho. Por ejemplo:

  • Merendar en el VIPS: poco criterio, poco mundo y muy susceptible al márketing. Seguro que le gusta lady Gagá.
  • Tomar un café en un Starbucks: moderna de mierda a la que no le gusta el café.
  • Al cine: mejor nos estamos callados.
  • Cafetería cuca: un romántico.
  • Bar de cañas de toda la vida: un canalla.
  • A la fnac a mirar libros: ¡cultureeeeeeta!
  • A tiendas de comics, videojuegos… : ¡friiiiiiiiiiki!
  • De cena a algún restaurante de moda: pudiente y muy “in”.

El desarrollo

Si esto fuera una obra de teatro o un guión de cine estaríamos en el segundo acto, ese en el que nuestros personajes, una vez pasadas las preguntas de a qué te dedicas, se van conociendo y acercándose al éxito o al fracaso. Toca hablar de los gustos, de las inquietudes, de los deseos y cada tema planteado, cada respuesta dada van inclinando la balanza a un lado o a otro. Si la cosa dura es buena señal. El alcohol suele ayudar a confraternizar. Los que tienen más experiencia van leyendo el progreso de la situación y pueden aventurar el final. Los más tramposos saben modelar la personalidad que exponen para así encantar a su compañero de juego.

Final

Si la cosa ha ido bien el final será feliz. En caso de ir buscando un polvo esto se traducirá en subir a la casa del que viva solo (que cuidadosamente se ha asegurado quedar cerca de donde vive). En los otros casos en un intercambio de teléfonos (si no se tuvieran de antes), esta vez sí un beso y un “oye, tenemos que volver a quedar”. El fracaso y el final triste están marcados por un “hablamos”.

Crisis hasta para follar

Cuando todo está muy mal y la cosa solo puede ir a peor la gente tiende a aceptarlo con resignación aferrándose a esas cosas que uno cree que no le pueden quitar. Una de esas cosas es el sexo, lo que viene siendo follar: por mucho que te quedes sin trabajo, por mucho que te retiren la beca o te quiten el paro puedes seguir follando. O no. Porque la cosa para algunos se ha puesto realmente difícil. La subida de los precios del transporte o el IVA de los condones hacen que, por ejemplo, en Madrid el precio mínimo de un polvo ronde los 3-4 euros si incluye desplazamiento. Y ojo, no hablamos de chaperos sino de polvos amistosos y amorosos. Eso sin tener en cuenta esas parejas que consideran que eso de follar por follar está feo y necesitan un cine (con IVA al 21%) o una cenita como excusa.

Otro factor que agrava esta situación es dónde follar. Con la crisis la emancipación de los jóvenes (y no tan jóvenes) se ha puesto prohibitiva, y el primer recurso para aquellos que vivían con sus padres, el coche, también. A esto le sumamos uno de los dos progenitores en paro quedándose como eterno guardián de la casa y llegamos al nuevo drama postjuvenil: no tener sitio.

Un pequeño inciso en nuestro análisis para revisar esta expresión tan marica de “tener sitio“. Es marica porque cuando los heteros se plantean aquello de follar ya saben perfectamente si la otra persona tiene sitio o no porque han compartido un mínimo de tres citas y se han contado la vida y milagros y hasta la boda de su hermana. Jamás se escuchará a un hetero decir eso tan romántico de “¿tienes sitio?” a no ser que buscando una polla que comer.

Dicen que el hambre agudiza el ingenio y quizá por eso los maricas afectados por este drama de no tener sitio donde consumar su amor eterno o pasajero han ido encontrando lugares alternativos. Algunos de los más destacados nuevos nidos de amor son:

  • El trastero: un clásico entre los de familias acomodadas que disponen de este cuarto desastre en el garaje en la finca familiar. Esos mismos que antaño follaban llenando la casa de velitas son los que ahora acondicionan trasteros con pequeños reproductores de música y luces indirectas.
  • La azotea: solo recomendable para aquellos que la tengan más grande que la media… la altura de la azotea, claro. Tiene el inconveniente de que solo se puede utilizar en verano pero la ventaja del punto exótico de ser al aire libre. El postpolvo tumbados sobre el incómodo suelo mirando las estrellas es lo más parecido a follar en la playa que se puede hacer en una ciudad.
  • Las saunas: por un módico precio se puede acceder a estos lugares de vicio poco camuflados. Aunque la mayoría de la clientela vaya a ver qué pilla uno puede ir perfectamente con la cosa ya pillada. Además uno vuelve duchadito a casa, son todo ventajas.
  • Probadores de grandes tiendas de ropa: con el punto añadido del riesgo a ser descubiertos es el recurso favorito de los que unos años antes iban a estas mismas tiendas a robar. Siempre quedará la duda de “¿había cámaras?”, “pues que disfruten”.
  • Baños públicos: pero ojo, que aquí pasa como con las saunas que va gente “soltera” a estos sitios a ver que pilla. Por eso los que van ya con pareja suelen evitar los más “públicos” (fnac, corte inglés, intercambiadores y estaciones) y buscarse algunos más privados en los que la gente no esté al sopesquete.
  • Casas de amigos: porque al fin y al cabo ¿qué mejor lugar que una casa con su cama y su cocina? Lo divertido de esta opción es que ya no es necesario tener un amigo altruista o muy amigo que ceda su casa para que sus amistades consumen su amor con amantes pasajeros o novios afectados por el drama de la crisis. La novedad en estos tiempos es que la cosa se ha mercantilizado. Gente que consiguió emanciparse hace un tiempo y ahora tiene dificultades para pagar el leonino alquiler se alía con amigos que están dispuestos a contribuir a ese alquiler con una cantidad fija al mes a cambio de unas horas en ese piso convertido en santuario del amor.